Como Explicarte, como decírtelo... - Eduardo A. Toledo Puga



Con un sueño rápido me quede, sin saber cómo decírtelo,

en estos pocos versos, en este poema tratare de describírtelo:

Eres como la estrella que me alumbra ahora, y amaneciendo te vas,

mi cálida huida al infinito, como un sueño rápido y voraz,



Caderas como bravo huracán, labios estrepitosos como un Río,

Tu ardiente furia de Volcán, me envolvían el fuego del delirio;

Pasión del mar, hondo y oscuro, y la voz de tu brisa agitada,

ojos de laberinto, destellantes, y mi piel de la tuya enamorada...



Cabellos como la dulce noche, que me envolvían la mirada;

agitación como de un veneno, que se derrama en tu llegada;

tú, un relámpago, que vienes me alumbras y te vas al cielo,

y sin darme cuenta, ayer viniste, ahora te vas, y acompañarte no puedo...



Frió - Marco Antonio Chávez Díaz


El pulso de la inspiración, se mece nervioso

cuelga sus metáforas en su rama del olvido

se agolpan en sus frisos símiles perdidos

yacen en sus postrimerías llanos recuerdos

pierde su vigencia al son de la luna enamorada

cual tambor de plata, eclipsa con su devaneo.

El poeta cierra ventana del pasado

para entreabrir rendija ,donde filtra azul frió,

abraza textura de seda desvaneciendo el hastió,

sueña sobre los rupestres caminos,

lacerando sus adentros un canto de niño.

El pulso de la pluma juega a la fiesta escondida

donde acentúan su reinado sonrisas y aplausos

para colmar de pasajera alegría su corazón desolado

sus letras son mundo dormidos, que llaman impacientes,

dominantes, arrabaleros destinos ,destinos fríos.

El poeta dormido, sueña oro cristalino

mundos incipientes de ayuno y vino

saborea extasiado en su mundo de olvido

el mezcalino sabor a humo dibujando vientos

llevando recuerdos a un puerto hipotético

un mundo por demás solitario y frió.

Leopoldo Peniche Vallado - Augusto Víctor Camelo Domínguez.





Elegancia literaria, objetivo en la expresión. Leopoldo Peniche Vallado usa la palabra cierta y necesaria para escribir lo que quiere decir. La pulcritud en los términos que emplea anhelan a cualquier pluma ser tomada por su mano. No escatima el elogio para quien lo merece ni se reserva  la crítica que construye y anima. Su sapiencia y vasta experiencia en las letras no le escatiman la autoridad moral que se ganó a pulso y puño.

En su obra “El Oriente Nacional en el Teatro de Peón Contreras”, (Edición conmemorativa del  sesquicentenario del nacimiento del dramaturgo yucateco), hace gala de sus dotes de investigador –una de sus facetas-, e historiador cuando se refiere al entorno político-literario prevaleciente a la  legada de José Peón Contreras a la capital del país en 1863: la agonía del imperio de Maximiliano de Habsburgo y una nueva era de vida en la política y en las letras al restaurarse la República en 1867, por mencionar algunos acontecimientos. Leopoldo Peniche es objetivo y honesto cuando dice que Peón Contreras carece de sensibilidad política y que toda su obra, tanto poética como teatral se alimenta de “sentimiento puros”, pero no le regatea el elogio cuando dice que emerge nuestro poeta y dramaturgo como el más grande y distinguido literato yucateco en la capital, desde donde se proyecta a otras estados del país.
 
 “El diamante en el yunque”, quizá la última obra que escribió Peniche Vallado y a la que denomina “Cinedrama en XXII diálogos”, es una muestra de su estatura como uno de los mayores dramaturgos de nuestro Estado. Logra mantener el interés durante toda su lectura, logrando despertar en el lector la impaciencia por llegar al final para conocer el desenlace de la trama. Combina en dicha obra cierta intriga bienintencionada que vá llevando a los protagonistas a un desenlace que se antoja pasional, pero que finalmente resulta en un mal entendido aclarado en aras de la buena amistad. El lenguaje es claro, totalmente entendible para cualquier nivel de lector y solo se requiere la vocación por su autor para interesarse y disfrutar de su contenido impregnado con el sello pulcro del dramaturgo Peniche.

Leopoldo Peniche Vallado fue más hombre de letras que político, ya que desde que ocupó la  titularidad de la Dirección General de Bellas Artes, entre los años de 1942 y 1946, hasta su desempeño como presidente del Consejo Editorial de Yucatán, A.C. (1985-1988), estuvo ligado excepto sus pocos años como Secretario General de Gobierno-, a las letras. Sus encomiendas como Director de la Biblioteca Central Estatal “Manuel Cepeda Peraza”, miembro de la Comisión Editorial de Yucatán, de la Academia Yucatanense de Ciencias y Artes, entre las más importantes, proporcionaron a nuestra cultura y acervo literario su grata compañía para acrecentarlo, a la luz  de sus dotes que lo distinguieron como uno de los más destacados y prolíficos dramaturgos, investigador, ensayista y periodista yucateco.

El tiempo me recorre - Jeny Guadalupe Mis May



El tiempo me recorre,

avanza implacable e imperturbable

filtrándose en mi sangre.

Encuentra caminos blancos

entre mi pelo negro,

con un paso seguro y lento.

Como un viajero silencioso,

imprime surcos profundos

Por el sendero de mi cuerpo.

Su huella se insinúa

reflejándose en mi mirada

tan oscura y tan cansada.

Viene y va, sutilmente,

en un tortuoso recorrido

sin esperanza ni sentido.

¡Pero mi alma inmadura

inútilmente se rebela

con sus últimas fuerzas!...

El tiempo me recorre,

inmutable yo lo espero…

Como una fiel amante al final lo beso.

La gravedad de la ciudad - Jhon Mcliberty



Caminar a caída libre
              Las avenidas se vienen encima
                                   Se enaltecen en mi rostro
Es la gravedad de la distancia


Me pierdo  entre la--- naturaleza muerta---  de la ciudad
                                            Entre el tumulto que parecen máquinas
        Me pierdo de locomoción en cada calle
En los transportes que huyen del tiempo
                     En condominios vociferan en silencio.

Las esquinas oyen mis pasos.

La órbita de mis corneas
Busca el eco de la estrepitosa urbe.
                   Cada instante que mis huellas palpitan

En los cauces de pavimento.

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